Las cosas naturales son siempre mejor que las de origen artificial. A continuación, os pongo unas maneras sencillas de ambientar el hogar sin gastarse mucho dinero y sin perjuicio para la salud.
En un bote de spray pones la siguiente mezcla: 1/4 de alcohol, 1/4 de agua destilada y 2 gotas de aceite esencial de limón. Agitas y ya tienes un ambientador fresco.
Mezcla 1/2 taza de agua y 20 gotas de tu aceite esencial favorito. Lo introduces en un frasco con spray y a ambientar el hogar.
Para evitar en el frigorífico los malos olores, partes un limón por la mitad, vacias la pulpa, y lo rellenas con sal gruesa o con bicarbonato. Lo pones en el frigorífico y no tendras malos olores.
Poner aceite esencial en un algodón, lo guardas en sitios como el baño o en armarios y tendras un olor especial.
Si te cuesta dormir, puedes poner dentro de la funda de la almohada un algodón con aceite esencial de lavanda (tiene propiedades relajantes). Si quieres aromatizar las sabanas, pones una toallita de bebe con unas gotas de aceite esencial y lo metes en la secadora para que las sabanas cojan el olor.
Puedes hacer un colgante de tela y echar aceite esencial. El olor se mantendra mucho tiempo y natural.
Para perfumar habitaciones, poner en la mitad de un recipiente, bicarbonato. Se le añaden unas gotas de aceite esencial, se hace agujeros en la tapa, se tapa y lo colocas en la estancia que quieras aromatizar. Si ves que pierde el olor, ves moviendolo para recuperarlo.
Para hacer un tarro de gel ambientador sigue los siguientes pasos. Necesitas los siguientes ingredientes: 1 sobre de gelatina, agua, colorante alimentario, aceite esencial, recipientes y una cucharada de sal.
El procedimiento: Echar el colorante en cada uno de los recipientes que quieras hacer. Preparas la gelatina, añades la sal y mezclar. Después echar el aceite esencial y mezclar, poner la preparación en los recipientes y mezclar con el colorante. Comprueba el olor y si es necesario, añadir más aceite esencial.